El retoque fotográfico es parte del proceso que experimenta una imagen como objeto comercial. Se trata de decir la verdad sobre un lugar o producto eliminando cualquier otra distracción de la fotografía. A menudo, esas modificaciones requieren mucho más que un retoque de luz y sombras. Para preparar una imagen comercial, a veces, es necesario embellecer algún elemento descuidado o eliminar algún objeto innecesario. En esos casos, la mano experta de un fotógrafo de interiores aplicará algún retoque en las fotografías de apartamentos y hoteles.
¿Son necesarios esos retoques? Habitualmente, sí. Un buen fotógrafo de interiores siempre tendrá la precaución de estudiar las imágenes que ha captado para asegurar su calidad final. El retoque forma parte del proceso creativo de una imagen comercial bien construida. Para realzar las imágenes captadas, nuestros fotógrafos inmobiliarios hacen uso de las herramientas digitales más avanzadas y versátiles. En el sector del diseño de interior, el retoque en las fotografías de arquitectura es mucho más que un trabajo técnico, es un arte.
Por qué usar retoques en la fotografía comercial
Hay muchas razones por las que puede ser necesario aplicar un retoque en profundidad a una imagen. Un fotógrafo de interiores experimentado sabe muy bien cómo utilizar estas variantes técnicas en las fotografías para respetar la realidad y destacar el espacio. Una buena motivación para usarlos es, por ejemplo, cuando cambia el tiempo de manera inesperada durante una sesión de fotos. En ese caso, se hace necesario compensar los valores de la imagen para que el resultado final sea el esperado.
¿Qué sucede si el reportaje de una vivienda debe realizarse antes de limpiar la piscina? Si tu plan de marketing necesita las imágenes promocionales de tu inmueble antes de la puesta a punto para la temporada, habrá que realizar una revisión digital de los exteriores. En el caso de unas instalaciones turísticas, nuestro fotógrafo de hoteles y apartamentos aplicará sobre la imagen original los retoques que sean necesarios con suma destreza. Como puedes ver en la fotografía de muestra, nadie notará la diferencia. Podrás poner en marcha tu estrategia comercial y, además, contar con tiempo suficiente para que el complejo esté listo para recibir visitas.
El retoque en las fotografías de apartamentos y hoteles como solución visual
Con el paso de las décadas, el retoque fotográfico se ha generalizado e, incluso, tiene sus detractores. ¿La causa? El ámbito de la moda. Su uso indiscriminado sobre el cuerpo de las modelos ha desencadenado una opinión pública contraria. Sin embargo, el retoque en las fotografías de interiores es una herramienta fundamental que incentiva la realidad y la presenta tal cual es. Es una solución muy aceptada y necesaria para finalizar los proyectos de exposición comercial.
Sin reinterpretaciones falsas, su modificación se limita a la realidad objetiva y en ningún caso pretende engañar. Un profesional trata la imagen de interior y la fotografía de paisaje con retoques para evitar a toda costa las deformaciones cromáticas y de perspectiva. Se preocupa por configurar una luz adecuada, equilibrar la saturación y buscar la mayor nitidez. Solo si es necesario, lleva a cabo la eliminación de algún objeto de manera puntual. Puede extraer reflejos o neblinas, entre otros “objetos” indeseados, para que el huésped vea el complejo turístico tal y como lo encontrará al llegar.
Estrategia de venta: El retoque en el marketing fotográfico
El objetivo de la fotografía de interior en el ámbito comercial es captar el interés del usuario y convertirle en tu huésped. Los retoques en las fotografías de hoteles y apartamentos visibilizan los atractivos de un espacio y descartan los pormenores innecesarios. La imagen promocional funciona como herramienta de llamada a la acción. Provoca una reacción emocional en el espectador que le atrae, favoreciendo su deseo a través de su propia necesidad. Es por ello que, además del trabajo in situ sobre la escena, nuestro fotógrafo de interiores lleva a cabo una edición y postproducción detallada.
Un buen fotógrafo siempre busca la armonía entre los contrarios, se preocupa por mantener el equilibrio entre la luz natural y la artificial. También observa con detenimiento las texturas y las gamas tonales, prestando especial atención a las distancias y a las líneas en perspectiva. La revisión es concienzuda y abarca cualquier aspecto técnico de la imagen. La meta es encontrar la proporción exacta entre los valores visuales y presentar una imagen irresistible frente a la mirada del usuario.
Para la fotografía inmobiliaria, el retoque es un fundamental de la imagen de calidad que solo los mejores profesionales saben aplicar con maestría. Si buscas excelencia para mejorar tus ventas, confía en Fotointeriores y dale a tu hotel o apartamento la imagen que se merece.
Redacción: Adela M. Sevilla y Néstor Marchador
Fotografías: Equipo de Fotointeriores