Fotógrafo profesional para restaurantes en Dos palillos
Un enamorado de la gastronomía como nuestro fotógrafo profesional para restaurantes sabe que, para estar al tanto de las novedades sobre los mejores restaurantes, hay que estar en las redes sociales. Facebook e Instagram son las dos redes más apropiadas para este tipo de empresa. Su estrategia de marketing se centra en su imagen de marca y en la interacción que tiene con el público. Sus dos metas principales son dar confianza y atraer a nuevos clientes. Para conseguirlo, las fotografías son la mejor táctica de seducción comercial. Todo lo que sea información visual, la decoración, el menú, el personal, ayuda al futuro cliente a tomar su decisión y a formular su reserva.
Fotógrafo profesional para restaurantes a tu disposición
Nuestros fotógrafo profesional para restaurantes habla de la calidad de cada local y de cada plato a través de las imágenes. Encuentran la manera ideal de resaltar los valores de un espacio gastronómico, dando siempre a cada proyecto su propia personalidad. La luz, los ángulos, las líneas en perspectiva, la profundidad, el color, todo ofrece respuesta a las principales preguntas de los usuarios. ¿Qué tal es la estética del local? ¿Son profesionales con talento? ¿Llenan el restaurante? ¿Su menú tiene calidad? Nuestras fotografías responden a las necesidades de los clientes potenciales antes de que formulen sus preguntas. Plasman la esencia del espacio y calcan la belleza del emplatado. Dos Palillos confió en nuestra propuesta, son un ejemplo de éxito, y hay que tener en cuenta la opinión de una Estrella Michelin.
Dos Palillos: Un restaurante de estrella
El restaurante Dos Palillos abrió sus puertas en Barcelona hace once años. Comenzó jugando con los conceptos cocina oriental y tapa española, hasta que llegó a convertirse en referente de la vanguardia oriental en Europa. A día de hoy atesora una estrella Michelín. Nadie mejor que ellos sabe lo que eso supone a nivel de exigencia profesional. Tener una estrella es complicado, pero no imposible. Lo realmente difícil es mantenerla. Y ahí entra la promoción en redes con imágenes que dejen impronta. Hay que atraer la curiosidad de nuevos clientes potenciales y reforzar las relaciones con los habituales. Un restaurante con la sala llena es un espacio que recibirá la visita de los críticos.
Cuando nuestro fotógrafo profesional para restaurantes se planteó este proyecto, tuvo muy claro que daría prioridad al movimiento y a los espacios oscuros. En los intermedios, a media luz, encontramos la esencia de ese lenguaje tan sutil que desprende el ambiente del restaurante. La primera imagen nos muestra como el ángulo de la mesa preside la escena desde varias perspectivas, marcando la línea central de la composición. En ambas instantáneas las luces y las sombras crean un efecto dimensional que intensifica los volúmenes. De esa manera, el significado de las imágenes llega desde el propio espacio y desde la vida que se desarrolla en él. Es un proyecto visual de gran calidad, digno del mejor restaurante.
La receta del éxito en sus manos
En abril de 2008 abría sus puertas el restaurante Dos Palillos donde antes había un Food Ball. El chef Albert Raurich y su mujer, Tamae Imachi, sumiller de gran nivel, comenzaron una nueva aventura empresarial que hasta hoy suma grandes éxitos. Con esta iniciativa, que nace de las entrañas de El Bulli, dieron a los amantes de la gastronomía otra buena razón para visitar el barrio de El Raval. Su menú se zambulle en la tradición nipona para resaltar sabores y texturas orientales en tierra occidental. Nuestro fotógrafo profesional para restaurantes se afana en la labor de captar la intensidad que existe detrás de la barra mientras los maestros crean.
Una imagen primordial que todo futuro comensal espera encontrar en la Web para abrir boca, es la fotografía de los expertos gastronómicos creando. Mancharse las manos no está de más en este caso, sobre todo si la confianza del cliente depende de ello. Y qué mejor manera de alcanzar ese clímax de seguridad que ver trabajar al chef Raurich junto a su mano derecha, Takeshi Somekawa. Este tipo de escenas requiere realismo visceral y saber captar el instante apropiado en el momento justo. Sobre todo, hay que crear luz con la técnica donde se imponen los límites lumínicos. Igualmente, hay que saber encontrar la mirada y redirigirla al espectador. Y luego, hay que saber traducir los contrastes del plato en una imagen para hacer que al usuario se le haga la boca agua. Las mejores estrategias de marketing tocan los sentidos y entran por los ojos.
El equipo humano lo es todo
El buen trabajo siempre se hace en equipo. Cuando nos referimos a Dos Palillos, estamos hablando de grandes creativos de la cocina de la actual realidad gastronómica en España. Es importante destacar que un buen chef se hace un hueco en el firmamento porque su equipo es capaz de demostrar su valía. Por esa razón, presentar al público en una imagen a todo el arsenal de expertos y jóvenes talentos, repercutirá en conseguir aún más su confianza. La familiaridad habla de equilibrio y normalidad, de compañerismo, de casa. En definitiva, de un trabajo bien hecho en un ambiente interesante y agradable. Este equipo está representado por auténticas fieras de la cocina, y se enfrentan cada día a su trabajo con templanza.
Fotointeriores tuvo la gran suerte de formar parte del equipo de Raurich e Imachi durante la elaboración de este proyecto visual. La experiencia fue memorable y las fotografías de marca aplaudidas. Nuestro fotógrafo profesional para restaurantes entra en cada local dispuesto a conocer su servicio y su producto desde la profundidad de la intimidad profesional. Antes de determinar el tipo de máquina, el objetivo o el perfil técnico, es primordial que el fotógrafo profesional para restaurantes sienta la filosofía de la empresa. Saber de qué habla un negocio con solo mirarlo y comunicarlo traducido a través de una imagen para enganchar al público, es cosa de expertos. O lo que es lo mismo, es cosa de Fotointeriores.
Redacción: Adela M. Sevilla
Fotografías: Equipo de Fotointeriores